Problemas Actuales en la Tributación de Servicios Digitales

La economía digital ha transformado la forma en que interactuamos y hacemos negocios, y con ello han surgido importantes desafíos para los sistemas de tributación a nivel global. La naturaleza transnacional de las plataformas digitales plantea un reto para los gobiernos al intentar gravar los ingresos de empresas que operan sin una presencia física en los países donde generan ingresos. Actualmente, muchos países aplican criterios de tributación basados en la residencia, pero esta estrategia se vuelve insuficiente cuando grandes multinacionales operan en múltiples jurisdicciones sin sede fija en cada una de ellas. Esto ha dado lugar a crecientes preocupaciones sobre la "no tributación", generando debates sobre equidad fiscal y afectando la recaudación de ingresos en diversas economías.

 La digitalización exige que los sistemas fiscales se adapten rápidamente para evitar un vacío de recaudación en sectores en expansión. A continuación, se exploran algunos de los principales desafíos y las propuestas que podrían mitigar los problemas actuales en la tributación de servicios digitales:


Desafíos en la Tributación de Servicios Digitales 

  1. Falta de Presencia Física: Las empresas de servicios digitales, como plataformas de streaming, redes sociales y de comercio electrónico, pueden operar en diferentes regiones sin la necesidad de establecer una oficina física. Esta libertad de operación permite, en muchos casos, que eludan las obligaciones fiscales locales, lo que resulta en una pérdida de ingresos significativa para los países en los que se encuentran sus usuarios. Esta carencia de presencia física impide que las autoridades fiscales locales puedan ejercer sus potestades de manera efectiva sobre dichas plataformas.
  2. Normativas Inadecuadas: En varios países, el marco normativo existente no aborda de manera específica y clara la tributación de los servicios digitales. Esta falta de legislación genera incertidumbre para las empresas y las autoridades fiscales, que se ven limitadas en la implementación de políticas tributarias efectivas. La falta de regulaciones actualizadas y diseñadas para la economía digital frena la capacidad de los países de asegurar una recaudación justa, lo que también afecta a los contribuyentes tradicionales que se enfrentan a una competencia fiscal desigual.
  3. Dificultades en la Recaudación: La recaudación de tributos en servicios digitales presenta complicaciones debido a la ausencia de mecanismos para rastrear y gravar adecuadamente las transacciones realizadas por proveedores no residentes. Las plataformas no locales, al no estar obligadas a seguir las mismas reglas fiscales, logran evadir en gran medida la fiscalización, lo que representa un desafío para las autoridades que buscan gravar este tipo de transacciones de manera efectiva.


Medidas para Combatir la No Tributación

Para enfrentar estos retos, los países han empezado a introducir medidas que buscan asegurar que las empresas digitales contribuyan a la recaudación tributaria, lo cual es clave para la sostenibilidad de sus economías. Entre las principales iniciativas se destacan:

  1. Registro Obligatorio de Proveedores No Residentes: Una medida que se está implementando en diversas jurisdicciones es exigir que las plataformas digitales y otros proveedores no residentes se registren ante las autoridades fiscales del país en el que operan. Esto incluye el cumplimiento de obligaciones como la retención del IVA en el punto de pago, facilitando una fiscalización más eficiente. Este requisito de registro se convierte en una herramienta clave para regular y controlar los servicios digitales.
  2. Agentes de Retención de IVA: Al asignar la responsabilidad de retención del IVA a intermediarios y plataformas de pago, como tarjetas de crédito y pasarelas de pago, se asegura que el impuesto correspondiente sea retenido y declarado, reduciendo la evasión. Esta práctica no solo simplifica la recaudación, sino que también permite que los gobiernos obtengan ingresos fiscales de manera más segura y transparente.
  3. Implementación del IVA en Servicios Digitales: Establecer un sistema de IVA en servicios digitales resulta fundamental para los gobiernos que buscan gravar a las empresas extranjeras que, de otro modo, no contribuirían a la recaudación. Este impuesto, que recae sobre el consumidor final, genera una fuente de ingresos considerable para las finanzas públicas y asegura que las empresas que operan en la economía digital cumplan con una carga fiscal justa y equitativa.


Impacto del IVA en la Fiscalidad de Servicios Digitales

La implementación del IVA en servicios digitales ofrece varios beneficios que responden a la realidad económica actual. A continuación, se detallan algunos de los aspectos más destacados:

  • Equidad Fiscal: Gravar los servicios digitales contribuye a equilibrar las condiciones de competencia entre empresas locales y extranjeras, logrando un sistema fiscal más equitativo. Las empresas que operan en el ámbito digital contribuyen, de esta manera, a las economías donde generan ingresos, promoviendo una competencia justa con las empresas locales que sí cumplen con las cargas fiscales tradicionales.
  • Incremento en la Recaudación: La aplicación del IVA a los servicios digitales ha demostrado ser una estrategia efectiva para aumentar los ingresos fiscales en varios países.
  • Adaptación a Nuevas Realidades Económicas: La introducción del IVA en la economía digital representa una respuesta de los gobiernos ante el creciente peso de los servicios digitales en la economía global. La digitalización ha revolucionado el comercio y las transacciones, y los sistemas fiscales deben adaptarse para reflejar esta realidad.


Fiscalidad de los Servicios Digitales en Ecuador

En Ecuador, los servicios digitales están sujetos a la tributación del IVA desde el 16 de septiembre de 2020, conforme a la Ley Orgánica de Simplicidad y Progresividad Tributaria. En los servicios digitales adquiridos a prestadores residentes en Ecuador, el IVA se cobra directamente por el prestador, quien tiene la obligación de declararlo y pagarlo al SRI como sucede en otro tipo de servicios.

Mientras que, en los servicios digitales adquiridos a prestadores no residentes en Ecuador, es decir en la importación de servicios digitales, existen dos alternativas:

  1. El prestador puede optar por registrarse ante el SRI. De ser así, el prestador del servicio digital no residente será quien cobre (perciba) directamente el IVA y los declare y pague ante el SRI.
  2. Si el prestador no se registra, el IVA se cobrará:

·        Mediante las empresas emisoras de tarjetas de crédito o débito, en calidad de agentes de retención, cuando se utilicen estos medios para el pago del servicio digital importado.

·        Mediante retención a cargo del importador del servicio, cuando se utilicen otros medios de pago.


Conclusión

La tributación de servicios digitales se ha convertido en un tema prioritario para los gobiernos que buscan mantener una recaudación fiscal sostenible en la era digital. La adopción de medidas como el registro obligatorio de proveedores no residentes, el uso de agentes de retención y la implementación de un IVA específico para servicios digitales representa un esfuerzo por combatir la “no tributación” y asegurar una carga fiscal más justa y equitativa. Al adaptar los sistemas fiscales a la nueva realidad digital, los gobiernos no solo protegen su base tributaria, sino que también promueven una competencia más justa en un mercado global en constante evolución.


Carlos Campos Vivas

Abogado | Asociado

Canessa Barriga Abogados 

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